Hace siete años, nuestra presidenta Alma Serra, nos reunió a un equipo de personas comprometidas con la educación para plantearnos una idea que le rondaba la cabeza desde hace tiempo. Había investigado en la base de asociaciones a nivel estatal y no había encontrado ninguna asociación que representase el nuevo movimiento que había surgido unos años antes entorno a la educación emocional. Con la idea de generar un espacio de diálogo que aunase a todas las personas que tenían esta inquietud, nos planteó crear la asociación y dar forma a un proyecto que intentase generar una línea común de un modelo de relación en las escuelas y familias que estaba surgiendo.
Siete años después, y tras cambios y mucho trabajo, damos un nuevo lanzamiento a este proyecto de vida de un equipo que esperamos que sume cada vez a más personas.